Javier Bardem gana el premio al mejor actor del Festival de Cannes por su papel en "Biutiful", del mexicano González Iñarritu. La Palma de Oro es para el tailandés Apichatpong Weerasethakul, decisión que genera la división de opiniones en la crítica.
Ha finalizado una nueva edición del festival de cine más prestigioso, el de Cannes, y como suele suceder en este tipo de eventos, la entrega de premios ha provocado el
aplauso de unos y el
rechazo de otros; en esta ocasión, la protagonista de estas enfrentadas reacciones es "Loong Boonmee raleuk chat", de
Apichatpong Weerasethakul. El cine de este director tiende a generar polémica por su visión poética, oriental y pausada de lo que significa el cine. Quienes apuestan por una visión arriesgada, que intente ir más allá del relato fotografiado, tienen al realizador tailandés en un altar desde que sorprendiera, hace seis años, con "Tropical Malady" en este mismo certamen. Para otros, es otro ejemplo de director que basa su potencial en la estética de sus filmes, a los que acusan de vacíos y pretenciosos.
Quien sí genera el aplauso unánime es Javier Bardem, quien suma otro galardón a su historial con el premio al mejor actor, compartido con el italiano Elio Germano, protagonista de "La nostra vita". Bardem ha sido lo más alabado del nuevo filme de Alejandro González Iñarritu, "Biutiful". El cineasta mexicano presentaba su primera obra no escrita por Guillermo Arriaga y, según la crítica, se nota la ausencia del guionista de "21 gramos", "Amores perros" y "Babel", entre otras.
La francesa Juliette Binoche es otra de las triunfadoras de la ceremonia de entrega, al conseguir el premio a la mejor actriz por su papel en "Copie conforme". Otro francés, Mathiu Amalric, es elegido mejor director por "Tourneé". El jurado, presidido por Tim Burton, asegura que
los premios se dieron por unanimidad. El cineasta español Víctor Erice confirmó el consenso, aunque añadió que "el tiempo pasa, el cine queda. Pero no todas las películas".
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